Modificación de conductas.
En la práctica la modificación de los comportamientos problemáticos de nuestros perros supone el conocimiento y aplicación de la información proporcionada por la etología canina y el desarrollo de los principios del aprendizaje.
La conducta es una consecuencia de la interacción entre genética y factores ambientales. Cuando los factores ambientales inciden negativamente en el desarrollo de un individuo pueden aparecer conductas que resulten inadecuadas durante la convivencia.
Un inadecuado manejo durante las etapas de desarrollo puede provocar un aprendizaje indeseado.
El desarrollo de patrones de juego social mal diseñados puede favorecer la expresión de conductas que pueden convertirse en peligrosas. Experiencias intensas durante un periodo sensible de desarrollo puede provocar procesos de sensibilización y la aparición de conductas motivadas por el miedo.
¿Cómo podemos ayudarte?
Podemos intervenir y recoger información para tratar de establecer un correcto diagnostico acerca del problema. Obtenemos la información mediante preguntas a la familia sobre el historial del perro y por la observación directa de los comportamientos.
Después, proporcionamos los conocimientos necesarios para gestionar correctamente los aspectos importantes de la convivencia con nuestros perros. De esta forma desde el primer día las personas responsables de los perros pueden comenzar a modificar y mejorar la convivencia con ellos.
Una vez disponemos de un diagnóstico, se informa del tratamiento adecuado. Es importante tener en cuenta que la intervención práctica dependerá de las características específicas de cada caso.Ni todos los perros son iguales ni todas las personas reúnen las mismas características.
¿Quieres probar?
No dudes en ponerte en contacto con nosotros sin ningún tipo de compromiso, podemos conocernos y ¡tú decides si congeniamos con tu perro!
¡A nuestros perros les gusta jugar!
Queremos que los perros puedan adaptarse a cambios en su entorno sin experimentar estrés. Proporcionar un ambiente tranquilo y satisfacer sus necesidades puede reducir la ansiedad causada por alteraciones y ausencias.
Preguntas Frecuentes
Si bien es cierto que existe una predisposición genética, que por ejemplo impide que mi perro sea capaz de tocar la guitarra con una cierta destreza, esto no implica que necesariamente se vea obligado por razones genéticas a perseguir bicicletas. El comportamiento es un producto, consecuencia de cómo los factores ambientales producen la manifestación de la información presente en el acervo génico o patrimonio genético.
Serán, por tanto, las experiencias vividas las que promuevan la realización de ciertas conductas en lugar de otras, siempre que se estén incluidas en dicho patrimonio genético.
Un programa educativo puede proporcionarnos los conocimientos necesarios para poder establecer una correcta comunicación con nuestros amigos caninos.